La Jornada | Braulio Carbajal | Lunes 25 de marzo de 2024, p. 16
Expertos han reconocido la respuesta de México a Estados Unidos ante el Secretariado del T-MEC, en la disputa comercial entre ambos países sobre las restricciones al maíz genéticamente modificado en las tortillas, a fin de proteger la salud pública y la biodiversidad del maíz.
Para especialistas de distintos organismos, la defensa de México fue un golpe contundente a los señalamientos de Estados Unidos, pues con una serie de estudios demuestra firmemente que tiene la razón de su lado.
Monserrat Téllez, integrante de la organización Semillas de Vida, resaltó que si México gana pondrá en entredicho todo un modelo de producción. Sería un gran logro establecer un estándar internacional. Pero si nuestro maíz es derrotado en su centro de origen, veríamos lo mismo en otros cultivos. Las empresas biotecnológicas se envalentonarían, alertó.
Fernando Bejarano, de la Red de Acción sobre Plaguicidas y Alternativas en México, destacó que la respuesta del gobierno mexicano presenta una amplía evidencia científica sobre los riesgos que para la salud humana y el medio ambiente implica el consumo de maíz transgénico con residuos de glifosato. El gobierno de México tiene todo el derecho de determinar el nivel de protección adecuado para la salud humana, destacó.
Inocuidad en entredicho
En agosto de 2023, cuando Estados Unidos llevó el caso del maíz a un panel internacional el caso del maíz, Tom Vilsack, secretario de Agricultura de ese país, hizo énfasis en que el enfoque de México hacia la biotecnología no se basa en la ciencia y va en contra de décadas de pruebas que demuestran su seguridad.
El pasado 5 de marzo, México expuso en un documento de 200 páginas que, lejos de existir un consenso sobre la inocuidad de los transgénicos, la evidencia científica apunta a diversos efectos negativos en la salud, en los maíces nativos y en el medio ambiente, y para sustentar estos señalamientos incluyó cientos de documentos.
Karen Hansen-Kuhn, directora de comercio y estrategias internacionales del Instituto de Agricultura y Política Comercial saludó esta vigorosa defensa de los programas de México para transformar su sistema alimentario y en favor de sistemas agrícolas biodiversos.